La UNESCO creó en 1973 la clasificación de patrimonio material (también conocido como patrimonio cultural tangible). La integran bienes muebles y bienes inmuebles, que se consideran “inestimables e irreemplazables” por el valor histórico-cultural que aportan. Dentro del patrimonio material existen subcategorías, entre las que se incluyen: patrimonio arquitectónico, patrimonio arqueológico, patrimonio artístico e histórico, patrimonio industrial y patrimonio natural.